En un emotivo evento realizado el viernes recién pasado, la Escuela rindió homenaje a sus queridas profesoras jubiladas, reconociendo sus décadas de dedicación y contribución a la educación de cientos de estudiantes.
Bajo la consigna “Un profesor trabaja para la eternidad, nunca sabrá hasta donde llegará su influencia”, estudiantes, docentes, asistentes de la educación y apoderados, honraron el desempeño de un grupo de profesionales de la educación que durante años enseñaron en estas aulas a un gran número de niñas cañetinas.
El Director del Establecimiento Rodolfo Chaparro señaló la importancia de rescatar la memoria de la escuela y destacó que «Ellos no solo enseñaron materias, sino que también inculcaron valores, inspiraron sueños y moldearon futuros. Este homenaje es un pequeño gesto de nuestra gratitud por su gran impacto en nuestras vidas», expresó el Director Chaparro.
Además, las estudiantes actuales deleitaron a los asistentes con presentaciones artísticas, incluyendo canciones y bailes, dedicados a las profesoras jubiladas.
Como acto simbólico, la Profesora Jubilada Rosa Durán Sanhueza entregó el taller de Ortografía a la Docente Damary Flores Pérez quien seguirá este legado que tanta satisfacción ha entregado a nuestra escuela.
«Este homenaje es un tesoro que llevaré siempre en mi corazón. Ver a tantos de mis antiguas alumnas y colegas reunidos aquí es el mayor regalo que podría recibir», dijo la profesora Juana Soto Fuentealba.
El evento dejó una sensación de alegría y gratitud en todos los asistentes, recordando la importancia de honrar y celebrar a quienes dedican sus vidas a la noble labor de enseñar.